Sector textil: los impactos climáticos y el verdadero costo de comprar ropa

La vestimenta cumple un rol fundamental en nuestra sociedad, nos permite proteger nuestro cuerpo, nos aísla del frío o calor y nos permite expresar quiénes somos, o quiénes queremos ser.  Sin embargo, el desarrollo de la industria textil ha permitido que, a través de la fabricación en masa y las tendencias rápidas, los precios de la ropa hayan disminuido considerablemente en detrimento de la calidad y del medio ambiente. Hoy en día tenemos 5 veces más ropa que la que tenían nuestros abuelos y se estima que del total de nuestro closet solo usamos la mitad.

La moda en alza ha generado que las tendencias cambien de manera acelerada y simplemente ya no podamos estar al día con el último grito de la moda. Como resultado, año a año la calidad de las prendas disminuyó, resultando en prendas que, una vez adquiridas, son rápidamente descartadas tras haber perdido su forma original, su coloración o se porque se han desgastado. Éste proceso es conocido como Fast-Fashion.

La industria de la moda es una de las principales contaminantes a nivel mundial, después de la industria petrolera, y es responsable de 92 millones de toneladas de residuos textiles producidos anualmente. Estudios recientes indican que, si continuamos con las prácticas actuales, las emisiones globales de gases de efecto invernadero se duplicarán para el año 2030, con todos los daños medioambientales que eso conlleva.

El impacto ambiental de una prenda se puede atribuir a los siguientes aspectos:

  • Agua: conocida como huella hídrica, contempla el agua necesaria para producir el bien. En éste sentido, alrededor de 9.700 litros son necesarios para producir sólo 1 kg de algodón, 7.500 litros para producir un solo par de jeans y cerca de 5 billones de litros de agua son utilizados anualmente por la industria de la moda. A su vez, las aguas residuales asociadas a los procesos de tinturas en muchos casos son desechadas en cursos de agua sin un tratamiento previo contaminandolos. Se estima que 200.000 toneladas de tintes se pierden en los efluentes cada año.
  • Energía: Además de la energía necesaria para su fabricación, se incluyen las emisiones generadas por la distribución y el trasporte de la ropa hacia sus clientes. Estudios han demostrado que, a nivel mundial, se consume un trillón de KWh de electricidad por año para producir 60 mil millones de kg de tela, esto significa que más de 16 millones de KWh son necesarios para producir tan solo 1 kg de tela anualmente a nivel global.
  • Residuos: Cada año se producen 100 mil millones de prendas, es decir, casi 14 prendas por cada ser humano del planeta. Algunas de ellas ni siquiera llegan al consumidor; Como consecuencia, más residuos textiles generamos, la ropa se ha convertido en algo desechable. Para Estados Unidos solamente se estima que aproximadamente 37 kilogramos de residuos textiles por persona son descartados al año y alrededor de 2.150 piezas por segundo.
  •  Microfibras: Las prendas sintéticas, al lavarse desprenden microfibras que son descartadas con el agua de lavado. Se estima que cerca de 700.000 microfibras individuales se liberan en el agua y casi el 10 % de los microplásticos dispersos en el océano cada año provienen de los textiles, causando daño en la vida marina que lo consume cuando ingresan a los ríos y océanos.
  • Destrucción de la selva tropical: año tras año se talan miles de hectáreas de bosques para la plantación de especies que se utilizan en la fabricación de tejidos. Tal es el caso de telas como el lyocell, el modal, el rayón y la viscosa (entre otras) que se fabrican a partir de la pulpa de la madera.
  • Productos químicos: Los productos que se utilizan a lo largo de todo el proceso de fabricación (ya sea durante la producción de la fibra, el teñido, el blanqueo, entre otros) constituyen uno de los principales contaminantes de la industria. A su vez, dichos productos también afectan a los trabajadores que confeccionan la prenda que, en algunas fábricas, no cuentan con la ropa de protección adecuada y pueden inhalar gases tóxicos. 

¿Qué podemos hacer para reducir este impacto?

    1. Reducir nuestro consumo. Solemos pensar que una prenda nos hará más felices, pero en verdad, ¿es realmente así?¿Es necesaria esa prenda?. Las prendas más ecológicas son las que ya tenemos en nuestro closet.
    2. Comprar ropa de marcas sostenibles. Esto es, en empresas que cumplan con normativas ambientales, que utilicen fibras naturales en sus productos, que no utilicen productos químicos para su producción y que en general se preocupen por el ambiente.
    3. Comprar ropa de mejor calidad. Si dejamos de comprar ropa de mala calidad, las empresas se verán forzadas a mejorar la calidad de sus productos, lo que nos permitirá a su vez conservar nuestra ropa por más tiempo, beneficiando a nuestro bolsillo y al ambiente.
    4. Practicar el Slow-Fashion. Como contraparte del Fast-Fashion, el Slow-Fashion promueve, además de pensar, hacer y consumir la moda de manera consciente, ética e intencionada, que se consuman productos duraderos y que no pasen de moda (atemporales).
    5. Reusar, reciclar o donar. Remendar o rediseñar la prenda le alarga su vida útil y evita que compremos una nueva. Donar aquella ropa que no se use o venderla en una tienda de segunda mano también es una buena opción. Como última alternativa, depositar aquellas prendas o residuos textiles en contenedores específicos de reciclaje textil.
    6. Ser conscientes con el lavado. Lavar ropa únicamente cuando sea necesario, tratando de completar la capacidad del lavarropas cada vez que lo usemos. También es recomendable que se lave a baja temperatura, lo que a su vez alarga la vida útil de las prendas.

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Fuentes: 

https://quantis.com/wp-content/uploads/2018/03/measuringfashion_globalimpactstudy_full-report_quantis_cwf_2018a.pdf

https://fashionunited.uk/news/fashion/people-do-not-wear-at-least-50-percent-of-their-wardrobes-according-to-study/2018081638356 

https://es.sustainyourstyle.org/en/whats-wrong-with-the-fashion-industry#anchor-fast-fashion 

https://earth.org/statistics-about-fast-fashion-waste/#:~:text=92%20Million%20Tonnes%20of%20Textiles,on%20landfill%20sites%20every%20second 

https://www.vogue.mx/moda/articulo/slow-fashion-que-es-definicion

https://cleanclothes.org/fashions-problems/waste-and-pollution 

https://edition.cnn.com/style/article/dyeing-pollution-fashion-intl-hnk-dst-sept/index.html 

https://redforestal.conicet.gov.ar/innovacion-fibras-textiles-de-madera/#:~:text=Las%20fibras%20textiles%20de%20madera&text=Se%20trata%20de%20la%20principal,%2C%20lyocell%2C%20modal%20y%20viscosa 

https://www.theguardian.com/sustainable-business/2015/mar/20/cost-cotton-water-challenged-india-world-water-day

Raja A. S. M., Arputharaj A., Saxena S., Patil P. G. Water requirement and sustainability of textile processing industries. In: Muthu S. S., editor. Water in Textiles and Fashion: Consumption, Footprint, and Life Cycle Assessment . Cambridge: Woodhead; 2019. pp. 155–173.

 

Autora: Agustina Rossi (Analista de Huella de Carbono RAMCC y ALPA).

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1 comentario en “Sector textil: los impactos climáticos y el verdadero costo de comprar ropa”

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